Autor: William Attia
Editorial: Ystary Games /Edge
Número de jugadores: 2 – 5
Duración: 60 – 150 minutos
Tipo de juego: Euro/Estratégico
Curva de aprendizaje: Media
Dependencia del Idioma: Baja
Board Game Rank: 19
El juego
En lo referente a la calidad de los componentes: el tablero es de cartón montado, los edificios son de cartón de buena calidad, los cubos, las monedas de cartón y los trabajadores son los típicos de madera de un euro medio y el libreto de instrucciones es correcto, aunque tiene la letra muy pequeña no apto para vista cansada.Eso sí, la caja tiene algo de aire pero no mucho.
En Caylus se supone que estamos en una ciudad francesa del siglo XIII y ganamos si aportamos mas que los demas jugadores en la construcción de la ciudad y el castillo del Rey.
El objetivo del juego es conseguir más puntos de prestigio que los demás jugadores al final del la partida.
En este eurogame clásico del año 2005, cuya mecánica principal es la colocación de trabajadores, dicho objetivo se alcanza mediante la construcción de las tres secciones del castillo, la edificación de edificios a lo largo del camino que conduce al castillo o mediante los favores reales..También puntúan al final de la partida el dinero(denarios), los cubos de recursos y el oro.
Hay, por tanto, varias formas de puntuar a través de unos turnos estructurados en 7 fases:
- Recaudar
- Colocar trabajadores.
- Activar Edificios Especiales
- Mover el Preboste
- Activar Edificios
- Construir Castillo
- Fin del Turno.
En este juego se sigue un sistema de activación de los edificios, donde se consigue el recurso o beneficio una vez que se retira el trabajador, en orden del camino. Lo que ocasiona que jugadores novatos o despistados obtengan el recurso posteriormente a cuando lo necesitan para activar un edificio que va antes en ese camino.
Además, las 4 filas de favores reales están divididos en 3 secciones que están disponibles cuando se puntúa la construcción de una de las secciones del castillo.
Cuando los jugadores van pasando(no quieren/no pueden colocar más trabajadores) aumenta el precio de colocación de trabajadores que inicialmente es de 1 denario por trabajador y normalmente te ves muy achuchado con el dinero.
Se puede decir que es poco interactivo salvo por una mecánica original muy bien implementada que es la del Preboste y el Alguacil. Estos funcionarios públicos pueden ser sobornados por los jugadores u obligados en el gremio de mercaderes para avanzar y retroceder en las casillas del camino. Lo cual ocasiona que algunos jugadores tengan sus trabajadores en fuera de juego (por detrás del Preboste) y les impide ejecutar su acción habiendo pagado por colocar su trabajador. En este momento se da mucho el chalaneo de prometer o decir que se va a pagar por mover el Preboste hasta 3 casillas y yo pagaré por moverlo hasta 3 casillas.
El final del juego se alcanza cuando se construya la última sección del castillo o el Alguacil llegue a la casilla que marca la puntuación de dicha sección.
La partida se desarrollo con Pepelessar en cabeza, bastante destacado, pero en un momento dado Paclimpio y yo nos pusimos de acuerdo para alargar la partida que tenía ganada. Al final a pesar de construir un edificio azul que daba muchos puntos no fue suficiente para alcanzar a paclimpio que ganó la partida por los pelos a base de oro a expuertas. Para Pepelesar y Matias era su primera partida de novatos y eso se nota.
Opinión personal
Ver la cara del rival cuando lo dejas en fuera de juego con el Preboste(funcionario municipal corrupto) no tiene precio y las discusiones sobre quién paga el soborno son agrias y acaloradas.
Como defectos del juego podemos decir que hay algo de «kingmaking»(un tercero que decide quién gana de entre los dos primeros), aunque muy mitigado si va a por lo que le convenga sólo a él y que la casilla de la puerta del castillo apenas se utiliza por ser poco útil.
Funciona mejor a 3 jugadores, ya que con más jugadores el entreturno puede hacerse largo y el juego puede volverse caótico.
En lo referente a rejugabilidad, se puede decir que es media ya que lo único que cambia es que los edificios rosados se colocan al azar, pero realmente pocas veces se juega a un juego más de 20 partidas
En definitiva se trata de un euro clásico de dureza media cuyo engranaje está muy bien construido y que funciona bastante bien.
Reseña realizada por Jasorel.